El instituto central de Arkansas ha decidido abrir sus puertas a personas negras para intentar que hubiese menos racismo. Sé que no será fácil y voy a sufrir bastante, pero si no hacemos algo para que esto cambie, siempre va a seguir como está.

    Solo nueve negros de otras escuelas han decidido presentarse voluntarios e ir, incluyéndome a mí.

    Me he cambiado de mi antiguo instituto Horace-Mann aún sabiendo todas las burlas e insultos que iba a sufrir por ser negra, pero esta es una buena oportunidad para intentar que la sociedad avance y ver un gran cambio.

    Tenemos que luchar para que nos valoren y respeten igual que a los blancos, ya que todos somos iguales, dependiendo de nuestro color de piel